coronavirus; otra familia que se nubla en la tristeza

En medio del dolor, tristeza  e inconformidad  despidieron sus ocho hijos  el pasado cuatro de marzo  al patriarca de la familia Núñez Peguero, quien  dejó este mundo luego de ser ingresado con síntomas del coronavirus.


Se trata de Porfirio Núñez de 98 años de edad, descrito por sus  seres queridos como un esposo cariñoso y excelente ser humano, que a pesar  de las atenciones recibidas no logró completar  las 24 horas luego de ser diagnosticado.

Ultimo de diez hermanos,  Porfirio aun con las mismas ganas de vivir de hace 60 años cae a manos del  mortal virus que nos ataca.
"No pudimos despedir a  papá, es triste ver partir a alguien tan querido sin el  homenaje que se merece," respondió su hija menor, al referirse a que ni siquiera ellos pudieron asistir al entierro  de su padre

Al igual que la familia  Núñez en el país hay muchas más que pasan por el dolor de perder a sus seres mas preciados y no pueden darles una sepultura digna en su honor. Hoy ya son 135 personas fallecidas, lo que podría equivaler  a unas 100 familias que pasaron por la misma situación.

"No queremos que esto también te pase a ti'' ¡Quédate en casa!

Enfermedades cardiovasculares; muerte o discapacidad

Las enfermedades cardiovasculares son trastornos del corazón y de los vasos sanguíneos. La mayoría de estas, a diferencia de otras enfermedades, se refleja a través de ataques fulminantes o dejando a su paso alguna discapacidad.

 En la actualidad se estima que el 40% de las muertes en República Dominicana se debe a accidentes cardiovasculares y un 10% de estos ni siquiera llega a enterarse de lo que padece. Este    es el caso de Francisco Mamerto García, quien a sus   40 años   nunca se había realizado un examen del corazón.

La madrugada del 3 de julio de 2014 fue ingresado en un hospital de Caracas Venezuela a causa de un derrame cerebral que lo deja sin poder mover toda la parte izquierda de cuerpo.

Las causas pudieron ser diversas, pero en el caso de Mamerto fue por el uso excesivo de tabaco, quien asegura fumaba cinco puros por día.

En República Dominicana el uso del tabaco es cada vez mayor, de mantenerse la tendencia se estima que dentro de cinco años dos de cada cinco personas morirán por el uso constante del mismo.

 De igual forma, se calcula que si este habito continua en crecimiento las enfermedades del corazón provocadas por el tabaco representarán la principal causa de muerte y discapacidad en el país.

El tabaquismo y sus consecuencias forzó a Francisco Mamerto a dejar en aquel país todo por lo que había trabajado durante años y en efecto   a vivir una vida de dependencias, vida que a pesar de todo el agradece.

“las enfermedades del corazón te ofrecen dos opciones: muerte o discapacidad y para la honra y gloria de dios, hoy agradezco la vida”, expresó el mismo.

Paulina García   hermana de Mamerto, aseguró que estas son enfermedades que marcan la vida no solo de quien las padece, sino también de toda la familia, debido a los costosos tratamientos que deben asumir para seguir cuidando la salud de su pariente.

Mamerto García vive con dos de sus hermanos en la comunidad de Agua de Luis, provincia Montecristi de donde viajo en diversas ocasiones a los centros de rehabilitación física más cercanos con la esperanza de que su transitar por la vida sea más fácil de lo que a sido durante los últimos años.

Madre habla de efectos de la cuarentena en la educación de los niños

“Mantener la calma en los momentos difíciles, garantiza la estabilidad emocional”, es  una de las recomendaciones que realiza la psicóloga infantil, y maestra Deisy Jimenez, quien luego de conocer la cifra de personas afectadas por el COVID 19 en el país, piensa en la presión que viven los padres al tener que convertir sus hogares en oficinas y escuelas a consecuencia de la cuarentena.

Jimenez quien además de ser profesional es una de las tantas madres que ha tenido que ajustarse a los cambios, habla del esfuerzo sobrehumano que realiza todos los días para lograr que sus hijos se adapten a la idea de que en la casa ahora tienen que desempeñar las mismas actividades que de manera habitual hacían en el colegio.

La psicóloga admite que el ambiente de las escuelas no es el mismo que se vive en los hogares, por la cantidad de factores que interfieren con la concentración de los infantes, y un ejemplo de ello es  de su hijo  Daniel de cinco años quien a pesar de ser un buen estudiante, realizar las asignaciones mientras se encuentra rodeado de tantas personas es algo que le cuesta mucho trabajo.

 Escusas como: ''estoy cansado, es aburrido o la casa no es el colegio'' son de las más frecuentes, por lo que día tras día tiene que buscar una manera distinta para que el menor acceda a realizar lo asignado. 

“siempre está pensando en la televisión o en los juegos, que es a lo que el está acostumbrado mientras está en la casa”, expresó Jimenez.

Al igual que Deisy Jimenez hay muchos padres que están pasando la misma situación, debido al aumento constate de la pandemia, El día de hoy, la cifra de casos confirmados asciende a los 1,488 infectados, y unos 68 fallecido. Por lo que  Jimenez recomienda mantener el ritmo y establecer horarios para las diferentes actividades que se están realizando en los hogares, en lo que las personas  vuelve a retomar sus rutinas diarias.